“El libro que
vendrá”
Albany Flores Garca
Diario El Heraldo, 08. 11. 2018.
¿Es posible
escribir literatura del presagio sin que tenga que ver con lo premonitorio o la
ciencia ficción, sino con la certeza de escribir una historia que se reescriba
a sí misma en el futuro? El libro perdido
de Eduardo Ilussio Hocquetot, del novelista sampedrano Gustavo Campos,
parece haberlo conseguido.
Autor de
libros experimentales como Los inacabados
o Katastrophé, Campos recobra lo
perdido en un libro de agilidad lingüística y precisión narrativa, lleno de
risas, sarcasmo y socarronería.
Hocquetot,
un escritor escurridizo de inteligencia provocadora y audaz, es un renegado de
la fama y del prestigio literario que ensaya la posibilidad –a través de
entrevistas, conferencias y críticas- de reírse de todo, incluso de sí mismo y
de su obra.
Entonces practica
una “escritura del desgano”, una escritura del tedio que no busca construir una
historia lineal, sino encontrar las formas para fabricar una literatura en
permanente construcción; de esa manera lo que escribe es siempre un borrador,
un vaticinio de “lo que vendrá”.
Campos nos
propone una escritura de posibilidades ilimitadas, donde una historia se
escribe y se cuestiona, se redacta y se corrige. Todo bajo la figura literaria
de la “puesta en abismo”, en la que una historia vive dentro de otra como una
caja china hasta el infinito; una técnica harto cultivada por autores
latinoamericanos como Jorge Luis Borges, Macedonio Fernández, Juan José Saer o
Sergio Pitol.
La trama
principal de la novela de Campos es que no hay una trama (o demasiadas tramas),
y la mejor forma de hallar su verdadero significado es no buscarlo; pero es, en
esencia, la historia de un escritor en guerra con su obra.
Pocos libros
hay tan divertidos en la novelística hondureña –como este-; dos de ellos ya son
clásicos de nuestra literatura: Mis tías
las zanatas, de Toño Rosa, y El
corneta, de Roberto Castillo. Por lo demás, en nada se parecen estos libros
al libro perdido de Gustavo Campos. Como Benet, el autor ha encontrado la
manera de escribir un libro que carezca de estructura formal; un libro que no
sea una novela, un ensayo, una crónica, un diario o una carta, pero que al
mismo tiempo sea todas esas cosas.
Albany Flores Garca
(Honduras,1989). Escritor, editor y ensayista; graduado en Historia por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras. Ha publicado, en cuento, Muerte prodigiosa (2014); en poesía, Geografía de la ausencia (2012) y El árbol hace casa al soñador (2016); y en ensayo Honduras, relaciones históricas entre Academia y Estado (1838-1848). Ha escrito y colaborado en revistas y periódicos de Honduras, Cuba, Brasil, Colombia, México e Italia, y es fundador de la revista académica-cultural El Zángano Tuerto. Es editor en máladive editores.